Un problema de sobrecalentamiento estaría retrasando el lanzamiento de las gafas de Apple hasta 2023

La intriga sigue siendo el elemento que rodea todo lo relacionado con las gafas de realidad virtual que Apple está preparando. Aunque las primeras filtraciones apuntaban a que el dispositivo llegaría al mercado en este 2022, el analista Mark Gurman acaba de anunciar que el lanzamiento podría retrasarse un año más debido a unos problemas de sobrecalentamiento.

El último de los imprevistos

Al parecer, el objetivo de conseguir que la temperatura de las gafas no se dispare durante su uso se está convirtiendo para la compañía en un reto algo más complejo de lo previsto. En concreto, la pretensión pasa por incluir un par de procesadores de alta gama, lo que a su vez estaría detrás de este giro imprevisto en torno a las fechas. Apple entiende que sus gafas deben incorporar un sistema equiparable en potencia al chip M1 de algunos MacBok Pro. Y en ello están. Lo que sí está claro, según palabras de Jony Ive, exvicepresidente del área de diseño de Apple, es que no va a recurrirse a ningún dispositivo accesorio que mitigue este obstáculo.

El nivel de exigencia de siempre

Más allá de grados centígrados, los detalles técnicos siguen saliendo poco a poco a la luz de la mano de periodistas especializados como Gurman. Su información más reciente señala que estas gafas estarían diseñadas, en principio, para ser usadas en videojuegos, comunicación y formatos audiovisuales. Es por eso que el apartado gráfico se está cuidando de manera minuciosa, siempre para estar a la altura de las expectativas y bajo el concepto de poner en el mercado un artefacto que realmente impresione a los usuarios.

Mark Gurman ha avanzado que el motivo por el que Apple se estaría decantando por este tipo de chips no es el de ganar velocidad en el procesador, sino el de conseguir un realismo mucho más avanzado. De hecho, la apuesta de la compañía consiste en integrar hasta dieciséis núcleos gráficos y diferentes pantallas con resolución 8K, tratando de lograr así que la experiencia del usuario sea totalmente inmersiva.

Apuntando a las grandes referencias

El perfeccionamiento en este apartado técnico sería otro de los motivos que estaría postergando la llegada al mercado de las gafas de Apple. Para la nueva fecha que se baraja, el año 2023, la realidad virtual habría conseguido establecerse como uno de los campos visuales más avanzados del momento. No en vano, en la actualidad ya encontramos escenarios tridimensionales especialmente logrados, como los que se dan en algunos videojuegos y en las plataformas de juegos de azar. De este modo, los nuevos casinos online en España han logrado posicionarse como una de las mejores referencias a tener en cuenta a la hora de crear simulaciones virtuales. En ellas, el jugador se ve inmerso en espacios que emulan la realidad a base de millones de polígonos y gráficos de primer nivel que provocan la sensación de habitar un mundo muy parecido al que conocemos en el plano físico. Los crupieres adoptan una apariencia casi humana, tan trabajada como la textura de los tapetes, las mesas, las máquinas tragamonedas y hasta la interacción con los demás participantes. Lo mismo ocurre con la nueva hornada de videojuegos que se están desarrollando en este último año, todos ellos amparados por el potente Unreal Engine 5, la última versión de este editor gráfico que roza el hiperrealismo.

Previsión de ventas

Los de Cupertino llevan desde el año 2015 sumidos en el desarrollo de sus gafas de realidad virtual, y aunque todavía no han terminado de darle carpetazo al asunto, ya circulan las primeras previsiones de ventas a medio plazo. En concreto, la compañía espera haber vendido unos cuarenta millones de ejemplares hasta el año 2025, teniendo en cuenta además que este tipo de mercado no es precisamente sencillo y que el precio de estas gafas podría rondar los 3.000 euros. Apple Vision, Apple Reality o Apple Lens son algunos de los posibles nombres que se están barajando para el dispositivo.